Una consecuencia de la naturaleza distribuída de git, es que la historia puede ser editada fácilmente. Pero si manipulas el pasado, ten cuidado: solo reescribe la parte de la historia que solamente tú posees. Así como las naciones discuten eternamente sobre quién cometió qué atrocidad, si otra persona tiene un clon cuya versión de la historia difiere de la tuya, vas a tener problemas para reconciliar ambos árboles cuando éstos interactúen.
Por supuesto, si también controlas todos los demás árboles, puedes simplemente sobreescribirlos.
Algunos desarrolladores están convencidos de que la historia debería ser inmutable, incluso con sus defectos. Otros sienten que los árboles deberían estar presentables antes de ser mostrados en público. Git satisface ambos puntos de vista. Al igual que el clonar, hacer branches y hacer merges, reescribir la historia es simplemente otro poder que Git te da. Está en tus manos usarlo con sabiduría.
¿Hiciste un commit, pero preferirías haber escrito un mensaje diferente? Entonces escribe:
$ git commit --amend
para cambiar el último mensaje. ¿Te olvidaste de agregar un archivo? Ejecuta git add para agregarlo, y luego corre el comando de arriba.
¿Quieres incluir algunas ediciones mas en ese último commit? Edita y luego escribe:
$ git commit --amend -a
Supongamos que el problema anterior es diez veces peor. Luego de una larga sesión hiciste unos cuantos commits. Pero no estás conforme con la forma en que están organizados, y a algunos de los mensajes de esos commits les vendría bien una reescritura. Entonces escribe:
$ git rebase -i HEAD~10
y los últimos 10 commits van a aparecer en tu $EDITOR favorito. Un fragmento de muestra:
pick 5c6eb73 Added repo.or.cz link pick a311a64 Reordered analogies in "Work How You Want" pick 100834f Added push target to Makefile
Entonces:
- Elimina commits borrando líneas.
- Reordena commits reordenando líneas.
- Reemplaza "pick" por "edit" para marcar un commit para arreglarlo.
- Reemplaza "pick" por "squash" para unir un commit con el anterior.
Si marcaste un commit para edición, entonces ejecuta:
$ git commit --amend
En caso contrario, corre:
$ git rebase --continue
Por lo tanto, es bueno hacer commits temprano y seguido: siempre se puede acomodar después usando rebase.
Estás trabajando en un proyecto activo. Haces algunos commits locales por un tiempo, y entonces sincronizas con el árbol oficial usando un merge. Este ciclo se repite unas cuantas veces antes de estar listo para hacer push hacia el árbol central.
El problema es que ahora la historia en tu clon local de Git, es un entrevero de tus cambios y los cambios oficiales. Preferirías ver todos tus cambios en una sección contigua, luego de todos los cambios oficiales.
Lo descrito arriba es un trabajo para git rebase. En muchos casos se puede usar el parámetro --onto y evitar la interacción.
Ver git help rebase para ejemplos detallados de este asombroso comando. Se pueden partir commits. Incluso se pueden reordenar las branches de un árbol.
Ocasionalmente, se necesita algo equivalente a borrar gente de fotos oficiales, pero para control de código, para borrar cosas de la historia de manera Stalinesca. Por ejemplo, supongamos que queremos lanzar un proyecto, pero involucra un archivo que debería ser privado por alguna razón. Quizás dejé mi número de tarjeta de crédito en un archivo de texto y accidentalmente lo agregué al proyecto. Borrar el archivo es insuficiente, dado que se puede acceder a él en commits viejos. Debemos eliminar el archivo de todos los commits:
$ git filter-branch --tree-filter 'rm archivo/secreto' HEAD
Ver git help filter-branch, donde se discute este ejemplo y se da un método más rápido. En general, filter-branch permite alterar grandes secciones de la historia con un solo comando.
Luego, el directorio .git/refs/original
describe el estado de las
cosas antes de la operación. Revisa que el comando
filter-branch hizo lo que querías, y luego borra este
directorio si deseas ejecutar más comandos filter-branch.
Por último, reemplaza los clones de tu proyecto con tu versión revisada si pretendes interactuar con ellos en un futuro.
¿Quieres migrar un proyecto a Git? Si está siendo administrado con alguno de los sistemas más conocidos, hay grandes posibilidades de que alguien haya escrito un script para exportar la historia completa a Git.
Si no lo hay, revisa git fast-import, que lee una entrada de texto en un formato específico para crear una historia de Git desde la nada. Típicamente un script que usa este comando se acomoda de apuro y se corre una sola vez, migrando el proyecto de un solo tiro.
Como ejemplo, pega el texto a continuación en un archivo
temporal, como ser /tmp/history
:
commit refs/heads/master committer Alice <alice@ejemplo.com> Thu, 01 Jan 1970 00:00:00 +0000 data <<EOT Commit inicial. EOT M 100644 inline hello.c data <<EOT #include <stdio.h> int main() { printf("Hola mundo!\n"); return 0; } EOT commit refs/heads/master committer Bob <bob@ejemplo.com> Tue, 14 Mar 2000 01:59:26 -0800 data <<EOT Reemplazo printf() con write(). EOT M 100644 inline hello.c data <<EOT #include <unistd.h> int main() { write(1, "Hola mundo!\n", 14); return 0; } EOT
Luego crea un repositorio Git desde este archivo temporal escribiendo:
$ mkdir project; cd project; git init $ git fast-import < /tmp/history
Puedes hacer checkout de la última versión del proyecto con:
$ git checkout master .
El comando git fast-export convierte cualquier repositorio de git al formato de git fast-import, y puedes estudiar su salida para escribir exportadores, y también para transportar repositorios de git en un formato legible por humanos. De hecho estos comandos pueden enviar repositorios de archivos de texto sobre canales de solo texto.
Acabas de descubrir una prestación rota en tu programa, y estás seguro que hace unos pocos meses funcionaba. ¡Argh! ¿De donde salió este bug? Si solo hubieras ido testeando a medida que desarrollabas.
Es demasiado tarde para eso ahora. De todos modos, dado que haz ido haciendo commits seguido, Git puede señalar la ubicación del problema.
$ git bisect start $ git bisect bad SHA1_DE_LA_VERSION_MALA $ git bisect good SHA1_DE_LA_VERSION_BUENA
Git hace checkout de un estado a mitad de camino. Prueba la funcionalidad, y si aún está rota:
$ git bisect bad
Si no lo está, reemplaza "bad" por "good". Git una vez más te transporta a un estado en mitad de camino de las versiones buena y mala, acortando las posibilidades. Luego de algunas iteraciones, esta búsqueda binaria va a llevarte al commit que causó el problema. Una vez que hayas terminado tu investigación, vuelve a tu estado original escribiendo:
$ git bisect reset
En lugar de testear cada cambio a mano, automatiza la búsqueda escribiendo:
$ git bisect run COMANDO
Git utiliza el valor de retorno del comando dado, típicamente un script hecho solo para eso, para decidir si un cambio es bueno o malo: el comando debería salir con código 0 si es bueno, 125 si el cambio se debería saltear, y cualquier cosa entre 1 y 127 si es malo. Un valor negativo aborta el bisect.
Puedes hacer mucho más: la página de ayuda explica como visualizar bisects, examinar o reproducir el log de un bisect, y eliminar cambios inocentes conocidos para que la búsqueda sea más rápida.
Como muchos otros sistemas de control de versiones, Git tiene un comando blame:
$ git blame ARCHIVO
que anota cada línea en el archivo dado mostrando quién fue el último en cambiarlo y cuando. A diferencia de muchos otros sistemas de control de versiones, esta operación trabaja desconectada, leyendo solo del disco local.
En un sistema de control de versiones centralizado, la modificación de la historia es una operación dificultosa, y solo disponible para administradores. Clonar, hacer branches y merges, es imposible sin comunicación de red. Lo mismo para operaciones básicas como explorar la historia, o hacer commit de un cambio. En algunos sistemas, los usuarios requieren conectividad de red solo para ver sus propios cambios o abrir un archivo para edición.
Los sistemas centralizados no permiten trabajar desconectado, y necesitan una infraestructura de red más cara, especialmente a medida que aumenta el número de desarrolladores. Lo más importante, todas las operaciones son más lentas de alguna forma, usualmente al punto donde los usuarios evitan comandos avanzados a menos que sean absolutamente necesarios. En casos extremos esto se da incluso para los comandos más básicos. Cuando los usuarios deben correr comandos lentos, la productividad sufre por culpa de un flujo de trabajo interrumpido.
Yo experimenté estos fenómenos de primera mano. Git fue el primer sistema de control de versiones que usé. Me acostumbré rápidamente a él, dando por ciertas varias funcionalidades. Simplemente asumí que otros sistemas eran similares: elegir un sistema de control de versiones no debería ser diferente de elegir un editor de texto o navegador web.
Cuando me vi obligado a usar un sistema centralizado me sorprendí. Una mala conexión a internet importa poco con Git, pero hace el desarrollo insoportable cuando se necesita que sea confiable como un disco local. Adicionalmente me encontré condicionado a evitar ciertos comandos por las latencias involucradas, lo que terminó evitando que pudiera seguir mi flujo de trabajo deseado.
Cuando tenía que correr un comando lento, la interrupción de mi tren de pensamiento generaba una cantidad de daño desproporcionada. Mientras esperaba que se complete la comunicación con el servidor, hacía alguna otra cosa para pasar el tiempo, como revisar el e-mail o escribir documentación. A la hora de volver a la tarea original, el comando había terminado hace tiempo, y yo perdía más tiempo intentando recordar qué era lo que estaba haciendo. Los humanos no son buenos para el cambio de contexto.
También ocurría un interesante efecto de "tragedia-de-los-comunes": anticipando la congestión de la red, la gente consume más ancho de banda que el necesario en varias operaciones, intentando anticipar futuras demoras. El esfuerzo combinado intensifica la congestión, alentando a las personas a consumir aún más ancho de banda la próxima vez para evitar demoras incluso más largas.